Hace unos días, una conocida que está terminando las prácticas en educación infantil me hizo una pregunta bastante interesante: Mel, ¿cómo puedo gestionar una reunión personal con la familia de un niño? En el ciclo no me han enseñado nada ni en las prácticas tampoco. Y me di cuenta de que tenía razón. En mi caso, tocamos muy por encima cuáles serían las pautas a seguir en reuniones con familias en educación infantil.
Más allá de los encuentros trimestrales con todos los padres de los niños, una familia os puede solicitar una reunión más personal para hablar de situaciones específicas de su hijo. O quizás, seáis vosotros como educadores infantiles los que queráis informar de un comportamiento o actitud a los padres de un niño. Por eso, os voy a dar seis consejos útiles y muy fáciles para llevar a cabo vuestras reuniones con familias en educación infantil.
1. Informaros acerca del tema de la reunión
Cuando los padres quieran tener una reunión personal con vosotros, podéis preguntarles el tema que quieren consultar. Así, podéis buscar documentación, recursos y artículos útiles para informarles correctamente. Del mismo modo, si sois vosotros los que solicitáis la reunión con la familia por un comportamiento o suceso concreto de un niño, os recomiendo que acudáis a la reunión informados para ayudar y apoyar a los padres de la mejor manera posible. Estoy segura de que los padres os agradecerán toda la información y colaboración facilitada.
2. Actitud relajada evitando las tensiones innecesarias
No penséis que es una tontería. Conozco a educadores infantiles que quisieron tener bajo control absoluto la reunión con las familias y el encuentro no salió demasiado bien. Os tenéis que mostrar tal y como sois. Recordad que las reuniones de tú a tú con los padres suelen ser más íntimas y personales que las grupales. Si os agobiáis mucho pensando en el día de la reunión, la familia os notará tensos, nerviosos e incluso excesivamente rígidos. Es mejor estar tranquilos y mantener una actitud positiva y comunicativa.
3. No pasa nada por no saberlo todo
Hay familias que piensan (erróneamente) que los educadores infantiles lo sabemos todo (incluido cosas del ámbito médico y psicológico). Está claro que vosotros no tenéis que conocer todas las respuestas de las preguntas que os hagan. Y os animo a reconocerlo delante de los padres porque no pasa absolutamente nada. Si es un tema educativo que necesitáis consultar y buscar información, decírselo a la familia sin sentimientos de culpa. Y si el tema se escapa de vuestra área, podéis recomendar a los padres que hablen con el profesional adecuado (médico, psicólogo…).
4. Ambiente acogedor y favorece la escucha activa
Cuando trabajaba en escuelas infantiles, conocí a padres que tenían miedo por no saber cómo actuar ni qué hacer ante diferentes acciones de sus hijos. Estaban asustados de que yo les juzgara, les acusara y les señalara con el dedo. Por eso, os recomiendo que hagáis de las reuniones con familias en educación infantil un encuentro acogedor, sin prejuicios y sin acusaciones. Recordad que estáis ahí para colaborar, apoyar y ayudar a los padres en todo lo que os sea posible. Os animo a que les escuchéis siempre y no juzguéis sus palabras ni decisiones.
5. Actitud respetuosa, pero no dejéis que os griten
Hay veces que las reuniones con familias en educación infantil (y en el resto de etapas educativas también) se conviertes en un foco de tensión e intranquilidad. Hay padres que acuden al encuentro con una actitud desafiante, acusadora y muy poco respetuosa. Los educadores infantiles no tenéis que aguantarlo todo. No os tenéis que quedar callados ante padres con una actitud de mala educación e intolerante. Es más, os recomiendo mucho que se lo digáis y que expreséis vuestras opiniones (con respeto, eso sí) sin miedo.
6. Transmitir motivación y compromiso por la educación
La mayoría de familias quieren que sus hijos se sientan seguros y cómodos en el centro educativo y con los educadores. En la reunión, tenéis que demostrar vuestro compromiso y motivación con la educación infantil. Pero también cercanía, sensibilidad, empatía, cariño y comprensión hacia la infancia. Os animo a que dejéis claro a los padres la vocación que sentís por este trabajo. De esta manera, la familia sabrá que su hijo está en buenas manos y no durará de ni un instante de vuestra profesionalidad y valores.
¡Y hasta aquí el post de hoy! ¿Qué os ha parecido? ¿Cómo gestionáis vosotros las reuniones con familias en educación infantil? Y sobre todo, si todavía no habéis tenido ninguna, espero que la entrada os haya ayudado a afrontar posibles futuras reuniones con tranquilidad y actitud positiva. No olvidéis de estar informados, de mantener el respeto, que no tenéis que aguantarlo todo y de que no pasa nada si no sabéis algo. ¡Seguro que lo hacéis genial!
Post recomendado: 10 cosas que se deben mejorar sí o sí en la educación infantil